Aliro ya está trabajando con una agencia de inteligencia en un proyecto de este tipo, dice Ricotta, y empresas de sectores sensibles como el financiero y el energético también están interesadas. Otro cliente de Aliro, EPB Quantum Network, tiene una red cuántica operativa en Chattanooga (Tennessee).
Otro caso de uso es la interconexión de pequeños ordenadores cuánticos en clústeres informáticos más grandes. Aliro anuncia hoy un acuerdo con las Fuerzas Aéreas de EE.UU. para llevar a cabo este proyecto, explica Ricotta.
Un tercer caso de uso de las redes cuánticas es mejorar la funcionalidad de un sensor cuántico. Si, por ejemplo, se utiliza un sensor cuántico como alternativa en caso de que ocurra algo con el sistema GPS, un buque marítimo podría tener sensores cuánticos en cada extremo del barco para mayor precisión. Estos sensores estarían conectados con una red cuántica.