Los dos ejecutivos saben bien de lo que hablan: Maza trabajó durante siete años en Siemens hasta incorporarse a una amplia carrera en la Administración y Sánchez-Vizcaíno, antes de ser CIO de Indra, estuvo muy involucrada en proyectos del sector público como directora de Gobierno Electrónico de la compañía durante un tiempo. “La influencia y discrecionalidad política es lo que marca la diferencia en el sector público”, afirmó Maza, explicando que los grandes proyectos de TI dependen, en gran medida, de las decisiones que toman los altos cargos que se ubican al frente de las diversas instituciones, que van cambiando con cada Gobierno. “Este entorno cambiante afecta a muchos aspectos; por ejemplo, que no hayan salido adelante los nuevos presupuestos y sigamos con los anteriores impacta de forma clara en los proyectos de TIC y en la capacidad de innovación, aunque, esto no significa que no se innove, que se hace mucho y muy bien, en nuestro sector”, afirmó el portavoz.
Para Sánchez-Vizcaíno, “es evidente de que al no estar tan encorsetado en los procesos de contratación y compra como el sector público, el privado tiene mucha más agilidad y rapidez para acometer proyectos, lo que le beneficia en materia de innovación”.
Gracia Sánchez-Vizcaíno (Securitas Group).
Juan Márquez (Foundry)
La diferencia en la estructura de la plantilla entre ambos sectores también impacta en las políticas de TI. “Es cierto que nuestras plantillas son muy rígidas, lo que, por un lado, nos puede perjudicar, pero, por otro, beneficiar, dado que disponer de empleados con un empleo estable es un valor y un elemento muy positivo”, reconoció Maza.
