“La complejidad de este creciente ecosistema digital deja a los empleados navegando por un camino roto hacia la productividad, lo que resulta en tiempo de trabajo perdido”, escribió Masud. “Las organizaciones deben lidiar con la entrega de una experiencia digital efectiva a los empleados”.
El retraso de la productividad: el caso de EE.UU.
Las observaciones de Masud sobre el retraso de la productividad de los trabajadores están respaldadas por la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos. La organización gubernamental encontró que la productividad laboral, o producción por hora, disminuyó en seis de los 10 trimestres entre el cuarto trimestre de 2020 y el primer trimestre de 2023, con un número plano en un séptimo trimestre. La productividad laboral aumentó casi un 20% en el segundo trimestre de 2020, cuando muchos empleados empezaron a trabajar desde casa, pero esas ganancias se estabilizaron rápidamente.
A más largo plazo, la productividad laboral estadounidense creció solo un 0,8% entre 2010 y 2018, según BLS. Más recientemente, Estados Unidos ha registrado cinco trimestres consecutivos de crecimiento de la productividad laboral desde principios de 2023, con un crecimiento de la productividad laboral a menudo vinculado a inversiones en infraestructura, capacitación de empleados y avances tecnológicos.