El gasto mundial en transformación digital, lejos de estancarse, continuará al alza a un ritmo de doble dígito impulsado por tecnologías emergentes de vanguardia. Según reza la última actualización de la Guía de Gasto Mundial en Transformación Digital de IDC, se prevé que la inversión global en transformación digital roce los 4 billones de dólares con vistas al próximo 2027. Así, con la inteligencia artificial (IA) y la IA generativa azuzando las inversiones, la firma de análisis e investigación estima que el mercado de transformación digital crezca con una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 16,2% durante el período 2022-2027. A medida que las organizaciones continúan priorizando la digitalización, se prevé que las inversiones en esta área continúen pegando el estirón, alcanzando potencialmente o incluso superando dos tercios de todo el gasto en Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) para el próximo trienio.
“La transformación digital ya no es una inversión discrecional: las empresas que quieren ser competitivas y ganar en la economía digital están liderando el camino”, afirma Angela Vacca, gerente senior de Investigación del grupo de Datos y Análisis de IDC. “Hoy en día, el gasto en transformación digital representa un mercado mayor en comparación con la parte no estratégica del gasto en TIC. Y las inversiones en negocios digitales se están acelerando aún más con la llegada de la IA generativa, que está teniendo un impacto en todas las industrias; aún así, las oportunidades son variadas en los diferentes espacios de mercado”.
IDC
El sector de los servicios financieros está creciendo a un ritmo muy rápido, con un CAGR a cinco años del 20,5% y tres casos de uso que están creciendo muy por encima de la tasa media. El procesamiento de reclamaciones basado en la automatización de procesos robóticos es el caso de uso de más rápido crecimiento, con una CAGR del 35,1%, seguido del asesoramiento financiero en tiempo real (29,5%) y la experiencia bancaria digital (29,3%). Estos casos de uso tienen algo en común: los tres hacen un uso muy intensivo de los datos y dependen en gran medida de la IA, la IA generativa y las tecnologías de datos y análisis. Los enormes avances que están empleando las instituciones financieras están transformando sus organizaciones en empresas más eficaces y más centradas en el cliente que pueden responder más rápidamente a la cambiante demanda de los clientes y a un entorno macroeconómico en rápida evolución.