Los tesoros arquitectónicos de la Basílica de San Pedro, corazón espiritual del cristianismo, accesibles gracias a la innovación tecnológica. Emplazada en la Ciudad del Vaticano, de estilo arquitectónico barroco y renacentista, alberga más de 400 años de historia en su interior. Hoy, gracias a la alianza suscrita entre el Vaticano, Iconem y Microsoft, la herencia y patrimonio de la Basílica de San Pedro trasciende sus muros mediante exhibiciones inmersivas habilitadas con inteligencia artificial (IA) y un sitio web interactivo.
Capturando la historia
Tomar fotografías de cada detalle de una enorme catedral histórica y unirlas todas parece una tarea abrumadora, especialmente en menos de un mes; sin embargo, la IA ha resultado de gran ayuda. Iconem, compañía especializada en la conservación digital con sede en París, ha empleado la fotogrametría avanzada e IA para crear réplicas en 3D de los monumentos históricos y sitios arqueológicos más famosos del mundo.
Andrea Louis, ingeniera de software y directora técnica de proyectos de Iconem, consideró que la experiencia de la Basílica de San Pedro era estimulante debido a su tamaño y complejidad, y a las múltiples capas espirituales, artísticas e históricas implicadas. Estar dentro de la Basílica de San Pedro le proporcionó a ella y al equipo de Iconem un conocimiento profundo de la iglesia, lo que les permitió desarrollar nuevas formas de llevar a los visitantes al interior del espacio.