Moisant, de Indeed, dice que se ha vuelto más atento a la búsqueda de eficiencias y a la eliminación de algunas de las complejidades que se añadieron durante el fuerte crecimiento y el ciclo de inversión de los últimos años.
Carco asegura que ve a muchos directores de sistemas de información adoptando enfoques similares, y añade que los directores de sistemas de información se enfrentan a un gran reto en este ámbito.
“La tecnología sigue calando cada vez más hondo en las empresas. Las TI han dejado de ser un impulsor útil de la productividad; cada vez saturan más todas las funciones de la organización, incluida su relación con los clientes”, afirma. “Gestionar el gasto en TI es cada vez más difícil y exige limpiar las antiguas tecnologías y relaciones para no malgastar el dinero. Esta limpieza del legado necesita ahora recursos dedicados”.
10. Atraer y retener el talento
Atraer y retener el talento ha sido durante mucho tiempo uno de los principales problemas para los CIO, pero Larry Bonfante, fundador y CEO de CIO Bench Coach, afirma que no sólo sigue siendo un área de intenso trabajo, sino que podría llegar a ser aún más crítica.
“Siempre ha sido un problema, pero ahora es exponencialmente más difícil y complejo”, afirma.
Hay dos razones principales. En primer lugar, la generación del baby boom dejará de trabajar en los próximos años y habrá menos trabajadores jóvenes para sustituirlos. En segundo lugar, los trabajadores de hoy tienen ideas diferentes sobre cómo, dónde y cuándo debe hacerse el trabajo. Por ejemplo, cada vez son más los que renuncian a los puestos tradicionales a tiempo completo y trabajan como contratados. Y muchos esperan tener horarios flexibles y opciones de trabajo a distancia con algunas oportunidades en la oficina.
“Se está produciendo una confluencia de problemas”, afirma.
Esta dinámica implica que los CIO deben adaptar sus estrategias de contratación y retención si quieren atraer y mantener el talento, dice Bonfante.
“Los líderes inteligentes están creando un entorno híbrido, en el que hay suficiente interacción humana, pero sigue habiendo flexibilidad y autonomía”, afirma, señalando que los ejecutivos inteligentes trabajan para crear horarios que funcionen para cada individuo en lugar de tener una política de talla única.
Los mejores CIO aplican el mismo enfoque a las estrategias de retención, adaptando las oportunidades de formación y promoción a las ambiciones profesionales de cada trabajador, y no sólo a las necesidades de la organización.
“Hoy hay que pensar en hacer de cada empleado la mejor versión de sí mismo”, afirma. Sí, puede que se marchen a otro trabajo, pero también es más probable que recomienden la empresa a compañeros que buscan un nuevo empleo.
En una nota relacionada, esas dinámicas de fuerza de trabajo junto con la rápida adopción de nuevas tecnologías como la IA tienen a muchos CIO trabajando en cómo pueden volver a capacitar rápidamente a los trabajadores para manejar las tareas emergentes, y cómo volver a capacitar a los trabajadores a escala, no solo dentro de TI sino en toda la organización.
“A los CIO se les pide que aumenten la fluidez tecnológica de toda la organización porque la tecnología está permitiendo que el trabajo se haga de forma diferente. Los procesos están cambiando y las decisiones se toman de forma diferente gracias a la tecnología. Existe la posibilidad de trabajar de forma diferente, y los CIO tienen que ayudar a los empleados a aprender y crecer”, concluye DiLorenzo.