Los proveedores de nube pública se han consolidado como el principal sustento de la TI empresarial moderna, ya que ofrecen una escalabilidad, una eficiencia operativa y una innovación sin precedentes. A pesar de todos los avances que han presentado, las empresas observan una realidad difícil de ignorar: ¿por qué los precios de la nube pública se mantienen estables, o incluso aumentan, mientras que los costes de hardware se han desplomado? La respuesta se encuentra en la intersección entre la economía, las prioridades empresariales y la complejidad de la infraestructura.
Los proveedores de nube pública operan con la promesa de una escalabilidad aparentemente infinita, pero son empresas que deben rendir cuentas a inversores y accionistas, además de a sus clientes. Sus inversiones en infraestructura de miles de millones de dólares, las expectativas de los accionistas de obtener rendimientos constantes y los elevados costes operativos contribuyen a una estructura de precios rígida, una realidad con la que muchas empresas se enfrentan actualmente.
He aquí algunas conjeturas basadas en datos anecdóticos, tendencias observadas y conclusiones lógicas. Un análisis de por qué los principales proveedores de nube no han repercutido el ahorro derivado de la disminución de los costes de hardware y qué significa esto para las empresas. Y lo que es más importante, ¿cómo pueden las empresas navegar por este panorama? En este sentido, es recomendable considerar alternativas a los hiperescalares, desde proveedores de servicios gestionados hasta nubes privadas. La expansión descontrolada de la nube pública puede enfrentarse a serios obstáculos a medida que las organizaciones reordenan sus prioridades en materia de rentabilidad.